Finaliza exitosamente proyecto de intercambio entre artesanos de Chile y México
En la culminación de este proyecto bilateral y que se gestó gracias al Fondo Conjunto de Cooperación Chile – México, artesanos aztecas visitaron la zona sur de nuestro país para aprender de los artesanos chilenos. Fruto de la primera etapa del proyecto, financiado por el Fondo de Cooperación Chile-México, que administra AGCI, un grupo de artesanos mexicanos llegó a Chile el pasado 19 de junio y asistió a distintas localidades rurales para aprender del trabajo de la cerámica en Quinchamalí (IX región), textilería mapuche en Temuco y tallado en madera en Liquiñe, región de Los Ríos.
El Programa, financiado en partes iguales por los gobiernos de Chile y México, permitió que en 2011 artesanos chilenos viajaran a México, específicamente a la localidad cuprífera de Santa Clara de Michoacán, para capacitarse y aprender de la cultura mexicana.
Para Eliseo Merino (35 años), artesano chileno del cobre, “esto fue una iniciativa muy enriquecedora, aprendimos muchas cosas de nuestros pares mexicanos, de su trabajo, especialmente en mi área (cobre). Yo me gané un proyecto y viajaré nuevamente a Santa Clara y quiero empaparme aún más de su cultura, de su trabajo, para luego transmitirla a mi gente. Afortunadamente se dio esta linda opción gracias a este Fondo Chile-México y al apoyo de la Fundación de Artesanos. Fue un crecimiento increíble”, precisó el oriundo de San Francisco de Mostazal.
Raúl Pontón, maestro tintorero de México estuvo en Temuco aprendiendo de la textilería chilena. Él, por más de 20 años, se ha dedicado a la investigación del teñido, y en Chile, encontró un negro “orgánico”. “Es un teñido único en Latinoamérica que los mapuche realizan con maqui y luego pasan por barro para que se oxide y así lograr el color negro. Este poncho que tengo con este color es una pieza de museo. Ha sido un encuentro maravilloso de dos culturas en un mismo continente. Me llevo una linda experiencia. Lamentablemente en Chile no tienen una fuerte cultura mestiza como sucede en México, la gente no usa prendas propias de su cultura”, precisó el experimentado artesano mexicano.
“Los chilenos tienen enormes recursos con potencial para la artesanía, como son las fibras de pelo de alpaca, vicuña y llama, algo muy valioso y único, con muchas posibilidades de exportación. A futuro, espero que exista un intercambio más fluido entre México y Chile, tanto en lo técnico como en lo comercial, pero no a nivel macro sino micro, que permita la capacitación de la gente y una mejor vida para las familias. Me voy fascinado de Chile, con muchas ganas de volver”, agregó Pontón.
Luis Fuente, 53 años, artesano chileno que también se dedica al cobre, se mostró agradecido por la opción de conocer más sobre la artesanía mexicana. “Fue una gran iniciativa y nos sirvió bastante a todos los que viajamos a México. El respeto que ellos tienen por sus tradiciones es increíble. El pueblo mexicano le da una gran importancia a la artesanía y eso es muy valorable. En Chile, lamentablemente, la artesanía no es mirada como arte, acá se dice que cuando algo está hecho de mala manera, es porque se hizo de manera artesanal, no se valora como corresponde al artesano. Ha sido muy importante que exista este Fondo y ojalá se pueda seguir repitiendo este intercambio”, señaló Luis Fuente.
Con la idea de seguir realizando más intercambios bilaterales que enriquezcan el trabajo de artesanas y artesanos chilenos, Lorena Neilson, Coordinadora del Fondo Conjunto de Cooperación Chile – México de la AGCI, se mostró contenta con el éxito de este programa. “Esto refleja el espíritu de cooperación de la cultura Latinoamericana, tema que hay que reforzar ya que, además, este tipo de proyectos abordan lo social, cultural y económico. Este proyecto ha sido muy exitoso, además se descentralizó, porque no se concentró un trabajo en Santiago, sino que se viajó a regiones para ver en terreno el trabajo de los artesanos de la zona sur”, aseguró Lorena Neilson.