Medioambiente, energía y cambio climático fueron el foco de la cooperación que Chile recibió en 2022
Con recursos gestionados por AGCID, se ejecutaron US$ 3,4 millones en 23 proyectos para el beneficio de nuestro país; y se informó del aporte de US$ 16,4 millones de socios, gestionado por otras instituciones públicas.
Santiago, 24 de mayo de 2023.- Con la presencia de autoridades de la Cancillería, ministerios, embajadores y embajadoras, representantes de organismos internacionales y de la sociedad civil, el Director Ejecutivo de la Agencia Chilena de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AGCID), Enrique O’Farrill, presentó la Cuenta Pública Participativa 2022, para dar a conocer tanto el aporte que benefició a nuestro país, como el que realizó el año pasado.
“Durante 2022 se ejecutaron 3,4 millones de dólares en 23 proyectos para el beneficio de nuestro país. De ellos, 11 contaron con el aporte de países como Alemania, España, Japón, México, Suiza, Región Valona de Bélgica; el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Banco Mundial, la Corporación Andina de Fomento (CAF), el Fondo de Adaptación, Unión Europea y la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR). Mientras, otros 12 corresponden a proyectos realizados a través del Fondo Conjunto de Cooperación Chile-México, en el que ambos países se benefician”, detalló el Director Ejecutivo de AGCID.
Chile recibe cooperación principalmente en materia de medioambiente, energías renovables y cambio climático. En este sentido, en 2022, gracias a la cooperación suiza, se lanzó la segunda fase del “Programa Clima y Aire Limpio en Ciudades de América Latina (CALAC+)”, para apoyar la descontaminación ambiental. “En esta oportunidad, se busca fortalecer las capacidades y proveer asistencia técnica a los ministerios de Medio Ambiente, Transportes y Obras Públicas, para la elaboración e implementación de normas de emisión, la incorporación de filtros de partículas en maquinaria pesada y apoyar el desarrollo del primer piloto de bus a hidrógeno verde y llevar la electromovilidad a regiones”, destacó Enrique O’Farrill.
Chile, por otro lado, recibió cooperación que no fue gestionada directamente por la Agencia, proveniente de socios tradicionales de nuestro país, como la Unión Europea, que contribuyó con US$ 9,6 millones para ejecutar proyectos en materia de medioambiente, recursos naturales y energía; fortalecimiento institucional y desarrollo social. Alemania, que facilitó otros US$ 4 millones destinados a iniciativas relacionadas con medioambiente; y por último, España que otorgó US$ 2,8 millones para desarrollar iniciativas en fortalecimiento institucional y recursos naturales.
La cooperación gestionada por AGCID, es un componente de la política exterior, por ello, sus acciones se enmarcan en torno a los ejes definidos por el Gobierno de Chile, que se expresan en la promoción del multilateralismo, los Derechos Humanos, la Política Exterior Feminista y la Política Exterior Turquesa. “Para estar alineados a nuestra Política Exterior, en AGCID mantenemos una nutrida agenda con los países vecinos y de la región. Además, seguimos trabajando en fortalecer la inserción de Chile en otras regiones del mundo para buscar alianzas que contribuyan a nuestro desarrollo”, explicó el Director Ejecutivo.
En relación a la Política Turquesa, en 2022, la cooperación para el beneficio de Chile estuvo centrada en medioambiente, energías renovables y la lucha contra el cambio climático. En cuanto a la política exterior feminista, “nuestra Agencia está incorporando paulatinamente la perspectiva de género en sus proyectos; y en el ámbito de la formación de capital humano, en las becas de Magister, otorgamos un puntaje adicional a las postulantes mujeres, para promover su mayor participación”, señaló O’Farrill.
La cooperación que Chile realizó:
La cooperación chilena estuvo presente en 41 países de América Latina y El Caribe, África y Asia, mediante dos componentes: transferencia técnica y formación de capital humano, destinando cerca de US$ 2,4 millones del Programa de Cooperación Sur-Sur y Triangular, de los cuales un 54,3% fueron destinados a transferencia técnica y un 45,7% a becas.
Es así como, como durante 2022, en transferencia técnica se ejecutaron 79 proyectos, principalmente en países de América Latina y el Caribe, con foco en México (39,8%), en el marco del Fondo Conjunto de cooperación que tenemos con dicho país; y luego Sudamérica (con foco en los países vecinos), con un 23,9%. Estas iniciativas abordaron distintas áreas: fortalecimiento y modernización institucional; desarrollo social; medio ambiente, recursos naturales y energía; cooperación económica para el desarrollo; agricultura y seguridad alimentaria; desarrollo territorial y local; y reducción del riesgo de desastres.
En materia de formación de capital humano, el 2022 estuvo marcado por el retorno a la presencialidad de los diversos programas de becas. En este sentido, AGCID otorgó 828 becas, 736 nuevas y 92 de continuidad, dirigidas principalmente a estudiantes y profesionales de América Latina y el Caribe (85,5%), destacando Sudamérica con un 46,4%, además de Asia y África. “Quisiera destacar que, del total de becas nuevas, el 53% fueron otorgadas a mujeres y el 47% a hombres. En el caso del programa de magister, un 67% de ellas fueron otorgadas a mujeres, lo que obedeció a la asignación de puntaje adicional a las postulaciones de mujeres respecto de los hombres: acción positiva incorporada por AGCID en este programa”, remarcó el Director de la Agencia.
Los compromisos presidenciales de AGCID:
En 2022, la Agencia suscribió 7 compromisos presidenciales, con el fin de trabajar por un Estado Democrático y Moderno, mediante el fortalecimiento de redes bilaterales, multilaterales y globales. En este sentido, el Director Ejecutivo destacó, en primer lugar, el restablecimiento de las convocatorias para presentar proyectos del Fondo Conjunto de Cooperación Chile-México, consolidando la cooperación sur-sur como una modalidad de beneficio mutuo.
Segundo, la ampliación de vínculos con los países vecinos en el ámbito de la formación de capital humano, facilitando a las ciudadanas y ciudadanos de localidades fronterizas, el acceso a formación de pregrado profesional o técnica en instituciones educacionales de nuestro país. En tercer lugar, se profundizó la difusión del aporte de la cooperación nacional en materia de formación de capital humano en América Latina, a través del reforzamiento de la difusión de los programas en las embajadas.
En cuarto lugar, destacó la ejecución de 15 proyectos de cooperación sur-sur descentralizados y transfronterizos, que abordan distintas áreas temáticas. Además, la continuidad de la ejecución de proyectos entre universidades chilenas (regionales) y universidades de Argentina y Perú; y la aprobación de 3 proyectos descentralizados en materia de salud, energías renovables y género con Perú. En este mismo sentido, se realizó el lanzamiento de una nueva convocatoria para proyectos entre regiones chilenas y provincias argentinas.
Como quinto punto, se detalló la participación de Chile, en 6 comisiones mixtas de cooperación técnica con países de América Latina: Costa Rica, México, Ecuador, Paraguay, Perú y Uruguay, en las que se aprobó la ejecución de 24 proyectos de cooperación. En sexto lugar, y con el objetivo de fortalecer la cooperación triangular, se constituyó el Comité Ejecutivo Técnico del “Fondo Conjunto de Cooperación Triangular Chile-Unión Europea”, instancia en la que se definieron los ejes temáticos prioritarios de este Fondo que apoyará a terceros países; y, por otro lado, se aprobó la ejecución de proyectos a través del Fondo Mixto de Cooperación Triangular Chile España.
Y, por último, AGCID, en conjunto con la Agencia de Cooperación Japonesa (JICA), suscribió un acuerdo para dar continuidad al Programa Kizuna, “Construcción de Sociedades Resilientes y Sostenibles frente a desastres en América Latina y el Caribe”, plataforma mediante la cual se establece una alianza para promover la mejora de capacidades de la Reducción de Riesgo de Desastres en la región, bajo el liderazgo y conocimiento de Chile y Japón.
Desafíos y perspectivas de la Agencia:
Finalmente, AGCID se planteó algunos desafíos y perspectivas, entre las que destacan: seguir contribuyendo a los compromisos adquiridos en el marco de la Agenda 2030 y sus Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS); impulsar los programas de cooperación sur-sur y triangular que Chile mantiene con los países de América Latina y el Caribe, con énfasis en los países vecinos; potenciar y diversificar nuestras relaciones con otras regiones del mundo, con socios estratégicos de Asia Pacífico y Europa, y promover una agenda de cooperación y diálogo político con países de Medio Oriente y África; y continuar trabajando en la construcción de asociaciones para el desarrollo, para la concreción de nuevos proyectos en beneficio tanto de nuestro país como de la región.
A respecto, el Director explicó que los esfuerzos de AGCID se centrarán en consolidar la relación de cooperación sur-sur con los países vecinos, a través de la ejecución de proyectos de cooperación bilaterales, descentralizados y transfronterizos, y el otorgamiento de becas de pregrado en zonas extremas; implementar la segunda versión del programa KIZUNA, con el fin de fortalecer la articulación entre instituciones relacionadas a la reducción del riesgo de desastres y potenciar el rol activo y resiliente de las comunidades de América Latina y el Caribe; e impulsar nuevos proyectos en materia de energía y medio ambiente con la Unión Europea, para el beneficio de Chile y hacia países de la región, mediante la cooperación triangular.
Por otro lado, consolidar la nueva estructura interna de AGCID en sintonía con la modernización de la Cancillería; fortalecer el Sistema Nacional de Cooperación Internacional para el Desarrollo, a través de una mayor articulación con los diversos actores nacionales e integrar de manera transversal la perspectiva de género en todas las intervenciones de cooperación para el desarrollo ejecutadas por la Agencia.